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martes, 18 de febrero de 2014

SÍNDROME DE ALINEACIÓN PARENTAL (SAP)



El síndrome de alineación parental o SAP, es un término que el profesor de psiquiatría Richard A. Gardner acuñó en 1985. En el estudio que realizó en casos de divorcios conflictivos o destructivos, se referió al conjunto de síntomas que resultan del proceso por el cual un progenitor, mediante distintas estrategias, transforma la conciencia de sus hijos con objeto de impedir, obstaculizar o destruir sus vínculos con el otro progenitor, hasta hacerla contradictoria con lo que debería esperarse de su condición, como Parental Alienation Syndrome

A pesar de existir publicaciones científicas llevadas a cabo por profesionales en la materia, como es el caso de la doctora, Amy J. L. Baker, la cual expone en sus publicaciones los distintos síntomas y efectos sobre los alienados, éste no es reconocido como tal o como trastorno alguno por las comunidades médicas legales. La teoría de Gardner y los estudios relacionados con ella han sido ampliamente criticados por los estudiosos de salud mental y leyes. Sin embargo, el concepto separado pero relacionado de alienación parental sí se reconoce como una dinámica en algunas familias divorciadas.

La existencia de este síndrome no ha sido aceptada por la Organización Mundial de la Salud ni por la Asociación Americana de Psiquiatría, que debido a propuestas externas está estudiando la posibilidad de incluirlo o no en su próxima edición del DSM. Para acceder al DSM, se están presentando sentencias que contienen las palabras síndrome de alienación parental. Es importante tener en cuenta que el “método científico” para obtener los datos, según Gardner, es el siguiente: «En este punto, los peritos que concluyan que el SAP es un diagnóstico aplicable, harán bien en incluirlo en el (los) lugar(es) adecuado(s) en sus informes (especialmente, al final). Al mismo tiempo, harán bien si incluyen cualquier diagnóstico del DSM-IV que sea aplicable para el alienador, el niño alienado y (si procede) para el progenitor alienado. De esta forma, incluso si el juzgado no reconociera el SAP, lo tendrá más difícil para ignorar estos diagnósticos alternativos del DSM.» 

Teoría de Gardner

Habitualmente es un fenómeno desencadenado por uno de los progenitores respecto al otro; del mismo modo que no necesariamente se desencadena por divorcio o separación, también puede ser provocado por una persona distinta del custodio del menor (nueva pareja, abuelos, tíos, etc.); también se han observado casos dentro de parejas que mantienen su vínculo, aunque son menos frecuentes. 

Gardner distingue tres grados de SAP: leve, moderado y agudo, aconsejando diversas formas de actuación para cada uno de ellos y destacando la importancia de distinguir en qué caso se está actuando. 

Es característico que los hijos estén involucrados en el proceso de deterioro, hecho que logra provocar el progenitor alienador mediante un mensaje y un programa constituyendo lo que normalmente se denomina “lavado de cerebro”. Los hijos que sufren este síndrome, desarrollan un odio patológico e injustificado hacia el progenitor alienado que tiene consecuencias devastadoras en el desarrollo físico y psicológico de éstos. Consecuentemente el síndrome afecta también a familiares del progenitor alienado como son: abuelos, tíos, primos, etc. Otras veces, sin llegar a sentir odio, el SAP provoca en el niño/a un deterioro de la imagen que tiene del parental alienado, resultando de mucho menos valor sentimental o social que la que cualquier niño tiene y necesita de sus progenitores: “el niño/a no se siente orgulloso de su padre/madre como los demás niños”. Esta forma más sutil, que se servirá de la omisión-negación de todo lo referente a la persona alienada, no producirá daños físicos en los menores, pero sí en su desarrollo psicológico a largo plazo, cuando en la edad adulta ejerzan su papel de progenitores. El síndrome de alienación parental está considerado como una forma de maltrato infantil. Por otra parte, la resistencia de muchos profesionales se explica por los casos de maltrato (incluyendo casos de abusos sexuales) en los que judicialmente se ha alegado SAP para desacreditar el testimonio de la madre y de sus hijos víctimas de abusos. Por esta razón, el diagnóstico diferencial del Síndrome de Alienación Parental requiere que no exista maltrato previo, psicológico o físico, a la madre y los hijos, por parte del progenitor alienado. 

En España, Estados Unidos y otros países se está intentando establecer el SAP como defensa legítima contra acusaciones de abuso infantil. Gardner es citado ampliamente por el grupo de defensores de la pederastia, quienes aseguran que ésta es una opción sexual legítima, pues en palabras del mismo Gardner “hay algo de pederastia en cada uno de nosotros.” Debido a esto, grupos defensores de los derechos de los niños y grupos de lucha contra el abuso sexual a infantes, han desmentido las teorías de Gardner, quien al parecer fue pederasta él mismo. Gardner se quitó la vida en 2003. 

Signos de alerta

Algunos indicadores típicos que permitirían detectar síntomas de maltrato:
Impedimento por parte de uno de los progenitores a que el otro progenitor ejerza el derecho de convivencia con sus hijos.* Desvalorizar e insultar al otro progenitor en presencia del hijo, aludiendo cuestiones de pareja que no tienen nada que ver con el vínculo parental.
Implicar al propio entorno familiar y a los amigos en los ataques al excónyuge.
Subestimar o ridiculizar los sentimientos de los niños hacia el otro progenitor.
Incentivar o premiar la conducta despectiva y de rechazo hacia el otro progenitor (basta con que los niños vean que esa actitud hace feliz a la madre o al padre, para ofrecer su dolor y así reconfortar al adulto alienador).* Influir en los niños con mentiras sobre el otro llegando a asustarlos.
En los niños puede detectarse cuando éstos no pueden dar razones o dan explicaciones absurdas e incoherentes para justificar el rechazo; y también si utilizan frases o palabras impropias de su edad, como diálogos similares o idénticos al del progenitor alienador, llegando incluso a recordar y mencionar situaciones que jamás han sucedido.
Consecuencias
Según algunos expertos, los niños que sufren este síndrome, padecen perturbaciones y disfunciones debido a que sus propios procesos de razonamiento han sido interrumpidos o coaccionados. Según esta teoría, los menores que sufren esto, relacionan sus frustraciones con los pensamientos o recuerdos asociados al progenitor alienado, y por tanto desarrollarán conforme vayan creciendo, tendencia a proyectar toda su negatividad psicológica sobre la imagen que tienen de tal progenitor, lo que termina por destruirla y por extensión a la relación. Para ello, el progenitor alienante, trae a colación la persona del alienado, sólo en los momentos en que el menor sufre alguna frustración; lo hacen sistemáticamente, es decir, en todas las ocasiones posibles antes explicadas, al tiempo que omiten toda referencia a la misma persona, sistemáticamente en todos los momentos en que el niño esté de buen ánimo. Esta polarización de frustraciones que asocia toda la negatividad mental del menor con su progenitor alienado o su imagen, es dirigida por manipulación consciente del alienante, sirviéndose de su prevalencia sobre el niño/niña. 

El Departamento de Justicia de Canadá declara que no existen evidencias empíricas sobre la existencia del SAP, y aclara que en circunstancias en las que uno o ambos de los progenitores activamente intentan disponer al niño en contra del otro, aunque efectivamente esto causa al niño sufrimiento emocional, la observación empírica indica que el niño procura por el contrario mantener la relación con ambos progenitores. También indica que, en aquellos casos en los que finalmente toma partido, lo suele hacer por aquel progenitor que se muestra más afectivo y cercano. 

Se ha criticado también que el SAP puede emplearse para enmascarar como tal, actitudes legítimas de rechazo a uno de los progenitores, en aquellos casos en los que el niño ha sido víctima o testigo de abusos, malos tratos físicos, verbales, negligencia, o abandono. De hecho, la sintomatología achacada al SAP puede por el contrario ser síntoma de que se están produciendo o se han producido dichos problemas en la relación con el progenitor alienado. 

En palabras del abogado Richard Ducote “El “SAP” es el sueño de los abogados para una defensa criminal, puesto que cuanto mayor es la prueba del crimen, mayor es la prueba de la defensa.” (De hecho el doctor Richard Gardner la desarrolló mientras trabajaba como asesor para hombres acusados de abusar sexualmente de sus hijos/as.) La teoría de Gardner incluye la idea de que el niño abusado debe permanecer con su abusador, pues según él, alejar al niño de quien lo abusa sexualmente hará inútil todo intento de terapia con el abusador. Gardner asegura, además, que la permanencia del niño con su abusador debe acompañarse por un constante reforzamiento en el niño de la idea de que no existen padres perfectos (y por lo tanto, debe soportar el abuso con paciencia). 

Por otro lado, otros países sí han admitido de alguna manera la existencia del Síndrome de Alienación Parental como problemática social. Más recientemente en Reino Unido, la justicia londinense hizo público que posee instrumentos legales fuertes para combatir a los progenitores (principalmente madres) que causan los efectos considerados dañinos del SAP en sus hijos.Otros países en latinoamérica también cuentan con un marco jurídico que protege a los niños del abuso provocado por el SAP, como es el caso de México y de Brasil, país en que cuenta con la ley n° 12.319, del 26 de agosto de 2010, que explícitamente habla de la Alienación Parental como figura legal. 

Día Internacional del Síndrome de Alienación Parental

El Día Internacional del Síndrome de Alienación Parental se celebra en todo el mundo, el 6 de mayo.

Olga García Bermúdez 

miércoles, 22 de enero de 2014

ESTILOS DE VIDA Y DIFERENCIAS DE GENERO EN LA ADOLESCENCIA


El periodo adolescente es uno de los más decisivos para la adquisición de estilos de vida.  La importancia de la adolescencia para el establecimiento de éstos tiene que ver con los importantes cambios psicológicos y contextuales que tienen lugar durante estos años en los que chicos y chicas realizan sus primeras salidas y reuniones con sus iguales sin la presencia de sus padres y en los que van ganando autonomía para tomar algunas decisiones relacionadas con el ocio y el estilo de vida (actividades extraescolares, consumo de sustancias, prácticas sexuales, etc.). En cuanto a las diferencias de género, distintas investigaciones realizadas a nivel nacional e internacional han aportado una buena cantidad de datos que indican la existencia de diferencias significativas entre chicos y chicas en muchas de las conductas estudiadas.

En los últimos treinta años se han producido en este país una serie de cambios tanto socioeconómicos como culturales que han afectado a la estructura social, éstos han producido modificaciones en los estilos de vida de la población en general y de los adolescentes y jóvenes en particular.

Fenómenos como «el botellón», consumo de sustancias, horas de llegada a casa o cambios en las rutinas del sueño, hacen preciso la realización de investigaciones que analicen estas modificaciones, algunas de las cuales afectan de manera distinta a chicos y a chicas, y nos muestren el estado actual de los estilos de vida de jóvenes y adolescentes de manera que nos permitan conocer la realidad en la que se desenvuelve sus vidas. El objetivo de esta investigación fue analizar los estilos de vida que se observan entre los 12 y 17 años de edad, estudiando las diferencias por curso y género en este periodo. La muestra de la investigación estuvo formada por un total de 2400 adolescentes, 55.5% de chicas y 44.5% de chicos, con edades comprendidas entre los 12 y 17 años, pertenecientes a 20 centros educativos de Andalucía. 

Los resultados muestran que existen correlaciones significativas entre la mayoría de las variables que conforman los estilos de vida, casi todas de tipo positivo a excepción de las relacionadas con consumo de sustancias en donde la mayoría fueron negativas. También han revelado la existencia de significativas diferencias de género en los estilos de vida de los adolescentes andaluces, ya que de las 15 variables analizadas, 10 de ellas presentaron diferencias significativas con respecto al género. Se encontró asimismo una disminución significativa, con el aumento de la edad, en una serie de variables: práctica de la actividad física y deportiva, participación en actividades extraescolares y horas de sueño. Aunque esta tendencia se observó en ambos sexos, también surgieron diferencias de género. Así, si entre los chicos fueron más acentuados la disminución del rendimiento académico y el aumento del tiempo con los amigos, entre las chicas fueron más acusados la diminución de la práctica deportiva, el retraso en la hora de irse a la cama entresemana y la consiguiente reducción de las horas de sueño. 

Estos patrones diferentes de chicos y chicas pueden estar influenciados y delimitados por la cultura, la historia y la propia sociedad actual que interpreta y define de forma distinta, reforzando o reprimiendo, patrones de actuación que son aplicables a chicos o chicas. Esto podría explicar claramente la menor implicación femenina en la actividad deportiva. Entrando en variables concretas, el consumo de sustancias fue más importante entre los chicos y chicas de más edad, sin que surgieran diferencias significativas entre ellos y ellas de manera global, aunque sí aparecieron diferencias en el consumo de tabaco, más elevado entre las chicas.

En lo que respecta a las actividades extraescolares encontramos una mayor participación en los chicos y una disminución con la edad, lo cual resulta especialmente preocupante si tenemos en cuenta la importante evidencia empírica que existe acerca del efecto positivo que pueden tener sobre el desarrollo y ajuste adolescente, especialmente en el caso de jóvenes de contextos desfavorecidos

En cuanto a los asuntos escolares, las chicas reconocieron una mayor dedicación a estudiar y hacer los deberes, y mostraron una mayor motivación escolar que ellos, al igual que mostraron un mayor rendimiento académico. La disminución a lo largo de la adolescencia del rendimiento académico se observó en ambos sexos, aunque  entre los chicos el descenso fue más acusado. En lo relativo a la utilización de las TIC, encontramos que las chicas puntuaron más alto en el tiempo dedicado a ver la televisión y a usar el móvil, mientras que ellos pasaban  más tiempo utilizando el ordenador y videojuegos.

En cuanto a las rutinas de sueño, no aparecieron diferencias de género significativas en las horas de sueño durante los días laborables. En cambio, en los fines de semana los varones declararon dormir algo menos, en parte debido a que se acostaban más tarde, probablemente porque madres y padres controlan menos la hora de llegada a casa de sus hijos varones. Más clara fue la disminución con la edad en las horas de sueño durante los días laborables, más acusada entre las chicas, una tendencia que ha sido encontrada en otros estudios, y que puede deberse en parte al retraso en los ciclos circadianos de sueño y vigilia, que se va haciendo más evidente según avanza la adolescencia. A ello habría que añadir la creciente autonomía de chicos y chicas para decidir la hora de irse a la cama.

Obtenido de la Revista Psychosocial Intervention:
Hernando, A.; Oliva, A. y Pertegal, M.A. (2013). Diferencias de género en los estilos de vida de los adolescentes. Psychosocial Intervention 22 (1), 15-23.

 Inmaculada Carrillo Jiménez

miércoles, 15 de enero de 2014

EL ALCANCE DE LA VIOLENCIA SEXUAL EN LA PAREJA



Las Naciones Unidas definen la violencia contra la mujer como "todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada".
 
La violencia de pareja se refiere al comportamiento de la pareja o ex pareja que causa daño físico, sexual o psicológico, incluidas la agresión física, la coacción sexual, el maltrato psicológico y las conductas de control.
 
La violencia sexual es cualquier acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual u otro acto dirigido contra la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de su relación con la víctima, en cualquier ámbito. Comprende la violación, que se define como la penetración, mediante coerción física o de otra índole, de la vagina o el ano con el pene, otra parte del cuerpo o un objeto.



Las estimaciones más precisas de la prevalencia de la violencia de pareja y la violencia sexual en entornos sin conflictos son las proporcionadas por encuestas poblacionales basadas en el testimonio de las víctimas. En un estudio de la OMS sobre la salud de la mujer y la violencia doméstica contra la mujer (WHO multi-country study on women’s health and domestic violence against women) realizado en 10 países, en su mayoría en desarrollo, se observó que en las mujeres de 15 a 49 años:


  • Entre el 15% de ellas en el Japón y el 70% en Etiopía y el Perú referían haber sufrido a lo largo de su vida violencia física o sexual perpetrada por su pareja;
  • Entre un 0,3% y un 11,5% referían haber sufrido violencia sexual perpetrada por alguien que no era su pareja después de cumplidos 15 años; 
  • La primera experiencia sexual había sido forzada en muchos casos (17% en la Tanzanía rural, 24% en el Perú rural, y 30% en zonas rurales de Bangladesh).

La violencia de pareja y la violencia sexual son perpetradas en su mayoría por hombres contra mujeres y niñas. El abuso sexual infantil afecta a niños y niñas. En los estudios internacionales realizados, aproximadamente el 20% de las mujeres y el 5%-10% de los hombres refieren haber sido víctimas de violencia sexual en la infancia.

Los estudios poblacionales sobre la violencia en las relaciones entre los jóvenes («violencia en el noviazgo») indican que este problema afecta a una proporción considerable de la población joven. Por ejemplo, en un estudio realizado en Sudáfrica entre personas de 13 a 23 años, el 42% de las mujeres y el 38% de los hombres refirieron haber sido víctimas de violencia física en el noviazgo.

Juan Carlos Quero

miércoles, 20 de noviembre de 2013

ULTIMA FASE DEL MOBBING: INTERVENCION DESDE LA EMPRESA O INSTITUCION




Repasaremos primero las fases anteriores para después comentar la intervención de la empresa o institución en este tipo de situaciones. De esta forma nos encontramos primero la fase de seducción en la que se intentar buscar las debilidades de la víctima y se suele empezar el acoso con algún momento de tensión. Después de este hecho aparece el conflicto propiamente dicho cuyas consecuencias últimas serían la estigmatización y aislamiento de la persona que sufre en mobbing.

 Por último el problema trasciende a la dirección de la empresa o institución y ésta puede actuar de varias formas a través del departamento de recursos humanos o desde la dirección del personal.
 
- Solución positiva del conflicto: Tras conocer el problema, la empresa, realiza una investigación exhaustiva del mismo y decide que el trabajador/a o el acosador sea cambiado de puesto de trabajo, descubre la estrategia de hostigamiento y articula los mecanismos para que no se vuelva a producir sancionando, en su caso, al hostigador.

- Solución negativa: Normalmente y, sin tener un conocimiento exhaustivo del caso debido a su nula o escasa investigación, la dirección suele ver a la víctima como el problema a combatir, reparando en sus características individuales tergiversadas y manipuladas, sin reparar en que el origen del mismo está en otra parte. De esta manera la dirección viene a sumarse al entorno que acosa activa o pasivamente a la víctima. 

Olga García 

miércoles, 23 de octubre de 2013

¿QUE ES EL MOBBING?

Podemos definir el "mobbing" como: "Situación en la que una persona ejerce una violencia psicológica extrema, de forma sistemática y recurrente y durante un tiempo prolongado sobre otra persona o personas en el lugar de trabajo con la finalidad de destruir las redes de comunicación de la víctima o víctimas, destruir su reputación, perturbar en el ejercicio de sus labores y lograr que finalmente esa persona o personas acaben abandonanado el lugar de trabajo"

El acoso laboral es un fenómeno del que nadie puede estar a salvo. Puede aparecer en cualquier nivel jerárquico y afectar tanto a hombre como mujeres.

El acoso hacia una persona se manifiesta de diversas maneras:
  • Manipulación de la comunicación: No informando a la persona sobre su trabajo, no dirigiéndole la palabra, no haciéndole caso, amenazándole, criticándole tanto con relación a temas laborales como de su vida privada
  • Manipulación de la reputación: Conmentarios injuriosos, ridiculizándole o burlándose de él o ella, propagando comentarios negativos acerca de su persona o la formulación repetida de críticas en su contra. 
  • Manipulación del trabajo: Proporcionándole trabajos en exceso, monótonos, repetitivos o bien, sin ninguna utilidad, así como trabajos que están por encima o por debajo del nivel de cualificación de la persona.
En sucesivos posts reguiremos tratando este tema y comentaremos aspectos como los tipos de "Mobbing" que existen, las fases de este proceso o los posibles perfiles de los implicados en este tipo de acoso, es decir, víctima y agresor. Os adjuntamos también un enlace donde podeis obtener más información. 


Olga García